“El agricultor”, emotivo poema para homenajear el rol esencial que cumple el hombre de campo (video)
Un poema de Amelia Barr, “The Farmer” (“El agricultor”), recorre las redes sociales como un simple pero a la vez categórico reconocimiento al rol central que cumple el hombre de campo en la comunidad y en la organización social y económica de su tierra.
El poema data de 1880 y Amelia lo escribió después de emigrar de Gran Bretaña a Estados Unidos y observar en zonas como Texas el concienzudo trabajo de los agricultores y granjeros de la zona. Con mayor o menor despliegue tecnológico y avances que tienen que ver, sobre todo, con mejorar las condiciones en las que se desarrolla el trabajo y el rendimiento económico que se obtiene, más lejos o más cerca de nuestro Tres Arroyos, el paisaje del campo y su gente son bastante parecidos, así que este homenaje es para todos.
“El agricultor”
El Rey hizo las reglas sobre la tierra y los mares
El señor puede vivir con gran nobleza.
El soldado se pasea con pompa y orgullo.
El marinero deambula por el inmenso océano.
Pero para que esto, o aquello, pudiera ocurrir.
El agricultor debió alimentarlos a todos.
El escritor sueña, el poeta canta.
Los artesanos hacen cosas maravillosas.
El médico cura, el abogado defiende,
El minero sigue las pistas de la fortuna.
Pero para que esto, o aquello, pudiera ocurrir.
El agricultor debió alimentarlos a todos.
El comerciante puede comprar y vender,
El maestro, cumplir su deber.
Pero la humanidad puede pasar sus días ocupados,
O tan solo pasarlos de forma agradable.
De rey a mendigo, para que todo esto ocurra,
El agricultor debió alimentarlos a todos.
El comercio agrícola, es de gran valor.
Él es socio del cielo y la tierra,
Él es socio del sol y de la lluvia,
Y ningún hombre pierde por sus ganancias.
Y la humanidad puede caer y levantarse
Pero el agricultor debe alimentarlos a todos.
Dios bendiga al hombre que siembra el trigo.
Que nos provee la leche, la fruta y la carne.
Haz que su bolsillo vaya pesado y su corazón ligero.
Que su ganado y su maíz y todo vaya bien.
Dios bendiga las semillas, que sus manos dejan caer,
Por el agricultor, que debe alimentarnos a todos.
