Coronavirus y niños: la importancia del fonoaudiólogo en su recuperación

El COVID-19 afecta a los más chicos también. Algunos de los que se infectan y tienen otras enfermedades de base permanecen más de 48 horas conectados a respiradores artificiales o intubados para superar las falencias respiratorias que causa el virus. Luego, entonces, es fundamental el rol que cumplen los fonoaudiólogos para que estos pequeños puedan recuperarse.
Mónica Trovato, jefa del Servicio de Foniatría del Hospital Pedro de Elizalde (ex Casa Cuna) aseguró que es habitual la concurrencia de estos profesionales a las terapias intensivas pediátricas, neonatologías y otras unidades críticas, y hoy en medio de la pandemia el trabajo se ha complejizado. “Los chiquitos a los que se debe realizar cirugías o cursan alguna enfermedad, o los que tienen COVID positivo, necesitan alimentarse luego de salir del respirador porque esa es su posibilidad de crecimiento y desarrollo para luego lograr su externación. Esa alimentación tiene que ser segura y eficiente, y los movimientos de la boca deben ser productivos para que ese alimento vaya al estómago. Y de esta forma nuestra disciplina logra que estos chicos se externen ya alimentándose por boca, lo que también es un gran avance para sus familias”, explicó.
Hoy hay alrededor de un promedio de 36 niños internados en el Elizalde con coronavirus. “Y antes de ser dados de alta tienen que estar alimentándose por boca. Nuestra experiencia con niños con COVID es en general con casos con otra patología de base, como problemas neurológicos, o un tumor o una traqueotomía, y que a la hora de alimentarse corren el riesgo de aspiración, de que el alimento vaya al pulmón, en vez de ir al estómago. Por eso el trabajo del fonoaudiólogo y su presencia en las unidades críticas es tan importante: porque puede hacer las valoraciones y las intervenciones necesarias para que este chico pueda comer”, contó Trovato.