Día del trabajador panadero: los Nuñez y cinco generaciones de España a la ciudad

En el día del Obrero Panadero, el tresarroyense Alejandro Nuñez, perteneciente a una familia que llegó, al incorporar a su hijo a la elaboración, a las cinco generaciones de trabajadores del pan desde España a esta ciudad, aseguró que la tarea “es muy sacrificada y sigue desarrollándose entre la noche y la madrugada. La tecnología simplificó mucho las labores, pero se sigue trabajando en esos horarios”.
Nuñez reflexionó también en torno a la falta de trabajadores calificados para la labor panaderil. “No hay chicos que quieran hacer esto, levantarse muy temprano, en plena madrugada, y eso es una pena porque casi no quedan obreros panaderos, y es necesario que la gente joven se forme”, sostuvo.
Asimismo, reconoció que “hoy ha caído el consumo de especialidades y también del pan mismo. Si uno recibe a una persona en el mostrador que te dice ‘deme diez pesos de pan porque tengo algo’, pero al día siguiente vuelve a comprar diez, y al otro, otros diez, es porque no hay plata. Esa es la razón por la que la gente no solo no puede darse el gusto de comprarse unas facturas o una torta, y también se ve en la compra diaria de un producto básico como el pan”.
Finalmente, aseguró que quienes elaboran productos en su casa y los venden por las redes sociales “están rebuscándosela como pueden. Cuando las cosas están bien hay trabajo para todos”.