En directo: La experiencia de una chavense en Beijing cuando estalló la pandemia

Luz Milagros García Procaccini, chavense radicada en Beijing, estaba en la capital China en el momento que se dio a conocer el inicio de la pandemia por coronavirus, con el brote que se dio en la ciudad de Wuhan.
“Yo soy docente, profesional egresada de la Universidad de Balcarce, y fui a hacer un doctorado en semilla papa, el procesamiento que se realizaba en China”, sostuvo inicialmente, en contacto con LU 24 luego de regresar a nuestro país.
Al momento de conocerse la novedad, Luz Milagros dijo que “todo se paró, realmente daba miedo salir a la calle por la poca gente que circulaba, siendo que la capital china es un mundo de gente, no había autos, ni gente, solamente iban a lo justo y necesario a comprar elementos, el 24 de enero avisaron que no íbamos a seguir con las actividades, no había casos nuevos de coronavirus pero había quienes se estaban recuperando”.
“La referencia que se daba era que el brote del virus había salido de un mercado que no estaba en muy buenas condiciones higiénicas, por alimentos contaminados que se vendían ahí; fue en diciembre cuando se dio el primer caso, pero esto apareció a mediados de enero y nadie creía que iba a ser tan contagioso o tan mortal; la mortalidad en China no es tan alta, pero la gente tenía miedo”, explicó.
“La gente de Wuhan viaja como lo hacemos nosotros dentro de esa provincia, por lo que ahí se produjo la expansión del virus; yo realmente salía una vez por semana porque todo se maneja con otra mecánica, vía virtual, la gente no necesitaba salir de su casa; yo vivía en una comunidad y la gente misma del lugar preguntaba ¿dónde vas, vas a volver pronto ¿y si teníamos tarjetas identificatorias para entrar solamente nosotros a la comunidad, no podía entrar gente externa” manifestó Luz.
“Salimos diez días después luego de recibir todos los días en el celular los números de casos nuevos, los que estaban infectados, y empezamos a salir en el caso mío, al Instituto, para regularizar, diez días después”, recalcó.
“Yo vi el cambio el 24 de enero y estuve hasta marzo prácticamente sin salir; luego iba al Instituto caminando, yo no me tome un subte hasta hace un mes cuando decidí volver, y recién el primero de septiembre se habilitaron las clases; estuvimos alertas a partir del 16 de enero y como el 24 era un día festivo se hizo el anuncio, yo estuve ese día con amigos que trabajábamos juntos, y fue la última vez que tomé el transporte público”, agregó.
“La hipótesis primera fue que había salido a comer sopa de murciélago, nos parecía hasta gracioso, y todos decíamos que el murciélago no estaba bien cocido, era lo que se empezaba a manejar allá”, dijo.
“Hoy no se puede entrar en China, tengo muchos amigos en el instituto que no pueden entrar; yo pude salir por todo un trabajo del consulado en Beijing, la documentación para hacer el tránsito y salir de China, expliqué que me iba porque tenía en Argentina cuestiones vinculadas a un tema de salud, y en cuatro días preparé todo y me fui”, concluyó.