La experiencia del personal de la salud en épocas de COVID-19: piden “cuidarse mucho”

7 noviembre, 2020

La experiencia del personal de la salud en épocas de COVID-19: piden “cuidarse mucho”

La enfermera Sabina Pirone, recibida en CRESTA en diciembre del año pasado, se refirió por LU 24 al trabajo cotidiano de los profesionales de la salud ante la situación de pandemia. En este momento, a meses de graduarse, se desempeña en la sala COVID del Hospital Pirovano y pidió a la comunidad “cuidarse mucho”.

Según relató, su jornada laboral comienza al llegar a un vestidor especial en el centro de salud donde se pone el ambo que usa habitualmente. De ahí se dirige a la sala COVID y en otra habitación se coloca el mameluco blanco con cierre entero. Luego se pone el barbijo quirúrgico, los guantes, la cofia y las botas de goma. Para ingresar a la habitación se colocan arriba un camisolín, otro barbijo M45 sobre el quirúrgico, antiparras y escafandra, y otro par de guantes.
Pirone afirmó que se siente “muy cuidada”, ya que al estar en contacto con quienes se sabe que están infectados el nivel de protección es muy alto, mucho mayor que en la calle u otros ámbitos en dónde no se tiene seguridad si las personas con las que se mantiene algún tipo de contacto están transitando la enfermedad o no.
A pesar de los cuidados y por el arduo trabajo que realizan día a día, ella y el resto de los profesionales de la salud de nuestra ciudad piden a la población que “se cuide mucho, que no se subestime a este virus, porque si bien algunas personas pueden pasarlo con síntomas muy leves, a muchas otras le ha costado la vida”.
La enfermera comentó que los días con la sala COVID llena fueron muy difíciles y espera que todo esto pase pronto.

“Enfermería es familia para el paciente ahí adentro”
La enfermera Florencia Pereyra, oriunda de General La Madrid y compañera de Sabina en la sala COVID, también comentó su labor durante la pandemia.
En marzo, cuando la pandemia afectó a nuestro país, se desempeñaba en el sector de emergencias, “siempre cuidándonos al ingreso de un paciente porque todo paciente respiratorio es sospechoso hasta que se demuestra lo contrario”. “Venimos hace rato con todo esto de los trajes, el equipo de protección personal, tratando de memorizar cada protocolo para no equivocarnos, cuidarnos nosotros y no enfermar a nuestras familias, siempre con el apoyo de los compañeros y los jefes”, subrayó.
“Ahora me llamaron y estoy en sala COVID que está complicada pero se va con muchas ganas de trabajar y hay un muy buen ambiente laboral con enfermeras que ya estaban y otras nuevas, que fuimos compañeras de carrera”.
Sobre la rutina, indicó que “en lo personal, me pongo el traje de protección y, más allá de que sea sala COVID, entro como si fuera una común. Se acompaña al paciente, se le hacen todos los cuidados, el baño, las curaciones, se le da la medicación, se le lleva su comida, todo lo que necesite, no es que salimos en cinco minutos”. “Se acompaña al paciente en la soledad que se siente en esa sala durante 10 o 14 días. También nos encargamos de hacer las videollamadas. Enfermería es familia para el paciente ahí adentro”, aseguró.
Pereyra hace 15 años que reside en Tres Arroyos y desde hace un año y medio trabaja en el Hospital, tras ser pasante por casi 18 meses.
Se recibió en 2019 y al respecto dijo que fue “muy buena la carrera, mis jefes de servicio hoy en día fueron mis profesores y eso está muy bueno”.
Finalmente, dejó un mensaje a la comunidad: “tienen que tomar las medidas de cuidado. Esto es verdad. Yo con 28 años veo enfermos con el virus todos los días. No hagan aglomeración de personas, usen el barbijo constantemente, lavénse las manos, utilicen el alcohol, más cuando se va al supermercado y demás. Hay que cuidarse”.