Laura Castro advirtió que la transición al Estado del Instituto Secundario Claromecó “es muy dura” y siguen pagando gastos

Laura Castro, presidenta de la Asociación Cultural que gestionó el Instituto Secundario Claromecó hasta su estatización desde el 1 de agosto, pero aseguró que la transición “es muy dura”, e incluso advirtió que tuvieron que hacerse cargo del pago de 266.000 pesos de cargas sociales y obra social de los sueldos de agosto de los docentes, en lo que consideró “algo injusto y que no nos corresponde”.
Castro agradeció el subsidio que el delegado Julián Lamberti gestionó por 70.000 pesos, pero hizo hincapié que “nosotros ya no estamos más, terminamos nuestra labor, incluso cerramos las cuentas en el banco y dimos de baja el personal en AFIP, pero Inspección nos está exigiendo su reapertura porque hay un reajuste de aguinaldo e incentivo docente por pagar, por eso estamos reclamando un poco de empatía por parte del Estado. Si en julio se estatizó el colegio, entonces los docentes tendrían que recibir en sus cuentas en las que cobran el salario por parte del Estado, el dinero que se les está debiendo, nosotros ya no damos más, no tenemos esa plata. Pero nos exigen que volvamos a abrirles cuentas sueldo privadas por algo que quizá no insuma más de un mes”. Además aseguró que hasta que se readecúen instalaciones y otros trámites, siguen pagando la luz y el gas del establecimiento.
Finalmente, admitió que la escuela “está funcionando bien, hay dos turnos de concurrencia al colegio, se contrató más personal y se crearon nuevos cargos, lo que en un pueblo chico no es poca cosa”.