Escudero: “el que cree que en el sistema de salud se miente, resiente y cansa a la gente que trabaja”
La cooperativa de salud Policoop participa como efector privado del sistema de salud tresarroyense unificado que, por decisión del intendente Carlos Sánchez, comenzó a funcionar para hacer frente a la pandemia de coronavirus. Además, participa del Comité de Contingencia y, según indicó su presidente, Pablo Escudero, no sólo hay que tener compromiso a la hora de cuidarse, sino también respetar las indicaciones de las autoridades en el momento en que se está pasando. “Lamentablemente hay gente que dice que se miente, que cuestiona la forma en que se maneja la información, pero todos estamos trabajando para dar soluciones”, sostuvo.
“Es bueno formar parte pero es complejo pensar todo el día en esto que estamos pasando. Estamos trabajando con nuestras ambulancias, y hemos podido comprobar lo que decía el doctor Gabriel Guerra, que ya no hay lugar para derivar pacientes en los centros de salud a los que habitualmente hacíamos traslados, de hecho no se pudo derivar a una parturienta. Hay mucha preocupación por esto”.
“Estamos viendo cómo los médicos trabajan a destajo en esta situación; hemos hecho traslados de Bahía Blanca a Buenos Aires y nos encontramos con siete, ocho ambulancias en espera para recibir pacientes. Es complicado y varía día a día; y con el comportamiento de la gente pasa lo mismo, vos ves gente que se cuida y otros a los que no les importa nada, que hasta parecen faltarles el respeto a los profesionales de la salud. Y es fundamental que la gente se comporte porque el que no toma conciencia es el factor multiplicador de los casos positivos en Tres Arroyos”, consideró Escudero.
“Hay gente que habla de mentiras y eso resiente y cansa”
Y en este sentido, el titular de Policoop también reflexionó acerca de “quienes dicen que Guerra demora en pasar datos, o miente, y eso cansa. Nosotros lo bancamos a Gabriel y estamos con él. Porque estamos todos juntos en un plan de contingencia buscando dar soluciones a la gente. Cuando se recibe un positivo hay que llamar a la gente, hacer el seguimiento de la familia, y el recurso humano médico es acotado. Pero las cosas se están haciendo bien y se están explicando de la mejor manera posible: el que no lo entienda así, lamentablemente, tendrá que pensar que si necesita ser derivado a un lugar de alta complejidad no tendrá cama. Esto no es chiste”.
“Todo esto es nuevo para todos a nivel mundial, y si los protocolos escritos cambian, es porque la enfermedad va cambiando también. Pedimos que la gente se cuide, porque no van a alcanzar los recursos, el Sanatorio, el Hospital, el Hispano, nada… Hay que ver cómo trabajan los profesionales en las terapias, todos encapuchados. Con solo verles los ojitos, las caritas, es deprimente. Son compañeros que están arriesgando todo”, finalizó.