Ricardo Román, de la Escuela Agraria 1: “tenemos que lograr que los chicos lleguen a la escuela”

Ricardo Román, presidente de la Cooperadora de la Escuela Agraria Nº1 que funciona en el exColegio Argentino Danés, aseguró a LU 24 que la entidad seguirá bregando por el acceso a todos los chicos al establecimiento y a la modalidad que han elegido, la secundaria orientada a la producción de carnes. Cabe recordar que la Comisión de Becas debate por estos días la necesidad de ayuda para solventar el costo del transporte, con dos posiciones: el vecinalismo que sostiene que la ordenanza solo prevé becas desde las localidades a la cabecera y no a la inversa, y el peronismo que solicita se haga una excepción con recursos del Fondo de Financiamiento Educativo, previsto entre otras cuestiones para estas contingencias.
“Son 84 alumnos, que ahora están yendo por semana alternada, en burbujas. Cuando nosotros contratamos el micro teníamos que cubrir 40 chicos por día, que hoy no se cubren. Lo que la Cooperadora paga es el 100% de esos lugares que no se cubren y a su vez el 50% del costo para las familias. Y después de casi dos años de pandemia, no podemos hacer eventos para cubrir los gastos. Se venden pollos, lechones, productos de la misma escuela, y con alguna donación que nos dan vamos haciendo lo que se puede. Pero nuestro último ingreso importante fue en la Fiesta del Trigo. Pasó mucho tiempo”, contó.
“Hablar de cheques de 50.000, 35.000 pesos en un momento como este es mucho dinero para una Cooperadora. Y tomamos la decisión de vender lo que se produce en la escuela porque los chicos no comen en el establecimiento en este momento, pero si no, parte de eso es lo que se consume cuando los chicos usan el comedor del establecimiento. No podemos repensar la escuela en un proyecto a futuro porque el pago del transporte se lleva todo lo que tenemos. No hemos podido cumplir con cosas que teníamos proyectadas a principio de año”, admitió Román.
En la actualidad, el establecimiento produce pollos, cerdos, trabaja en apicultura y esperaba poder incorporar vacas lecheras, lo que todavía no se ha podido lograr por lo ya descripto. Mientras tanto, esperan respuesta a un pedido de subsidio que se gestiona ante la Provincia. “La esperanza es lo último que se pierde. Lo que queremos es una ayuda que nos permita pasar este momento de pandemia, y seguiremos trabajando para que los chicos puedan llegar con el micro al colegio. Ese es nuestro objetivo: aunar voluntades para que los chicos vayan a la escuela”, finalizó.