Una preceptora y la experiencia de mandar cartas manuscritas a los alumnos

1 septiembre, 2020

Una preceptora y la experiencia de mandar cartas manuscritas a los alumnos

Karina Salvador, preceptora de setenta alumnos de la Escuela Madre Cabrini de Rosario, lleva a cabo un proyecto de escritura de cartas manuscritas para los que finalizan la secundaria. “Para ellos, una carta escrita a mano es algo obsoleto o prácticamente desconocido, pero para seguir con ellos y mostrarles que teníamos la intención de un encuentro con ellos de corazón a corazón, para animarlos a continuar con este formato de escuela novedoso y diferente que atravesamos este año, les escribimos estas cartas para que les lleguen en el receso escolar”, contó.

Los docentes escribieron esas cartas con la consigna de “destinarlas a alguien que no ves y con quien tendrías ganas de compartir un abrazo, y decirle que más allá de sus pérdidas concretas y el no saber si habrá viajes de egresados, fiesta de graduación, estamos con ellos”.
“Escribir cartas a la vieja usanza requiere un ritual que va desde elegir el papel y comprar el sobre, hasta enviarla, pero además enfrentarse al papel pensando en el destinatario de esa carta y en qué contexto la iba a recibir. Fue una experiencia muy enriquecedora para todos”, consideró.
“La sorpresa para los chicos fue grande porque nadie pensó que dentro de un sobre había una carta de un profesor que lo estaba extrañando y pensando. Y así, dijeron muchos, se sintieron cerca de la escuela”, finalizó.