La Corte confirmó 32 años de prisión para un puntaltense que violó a sus hijas y sobrina

26 julio, 2020

La Corte confirmó 32 años de prisión para un puntaltense que violó a sus hijas y sobrina

La Corte Suprema de Justicia de la Nación le puso fin a las últimas aspiraciones de un hombre condenado a 32 años de prisión por violar a sus dos hijas y una sobrina y confirmó la pena. El fallo contra N.F.R. -no se lo identifica para preservar la identidad de las víctimas- se registró hace algunos días.

Los jueces Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda, Ricardo Luis Lorenzetti, Horacio Rosatti y Carlos Fernando Rosenkrantz, del máximo tribunal, desestimaron la queja que había planteado su defensa al rechazo del recurso extraordinario declarado inadmisible por la Cámara de Casación Penal.
El acusado recibió la sanción el 8 de septiembre de 2016, mediante un juicio por jurados que lo encontró culpable en al menos 7 cargos de abuso sexual. Una de sus hijas tenía entre 6 y 14 años al momento de los hechos y la otra 8, mientras que su sobrina, también menor, sufrió tentativa de abuso y corrupción, porque “intentó exhibirle pornografía”. Los hechos sucedieron en Punta Alta.
“Las arruinó para siempre”, dijo Virginia, una tía de las hermanas, una vez que se conoció el veredicto  luego confirmado por la exjueza María Eloísa Errea de Watkins, del Tribunal en lo Criminal N° 2. “Ni con toda la vida va a pagar lo que hizo”, agregó.

Separación y cambio de jurados
Ese juicio -el undécimo de esas características en Bahía- tuvo una particularidad. La jueza profesional que lo conducía debió apartar a dos de los jurados titulares y reemplazarlos por suplentes.
Según publica La Nueva, fue ante un contacto que tuvieron -en medio de la audiencia- con un familiar del acusado que antes del debate lo había apuñalado en un intento de hacer justicia por mano propia.
“¿Cómo viene la mano?”, les preguntó el pariente de las víctimas y uno de los miembros del jurado le respondió: “La única manera de ayudar a tu sobrina es alejándote”.
De hecho, uno de los fundamentos de la apelación de la defensa de N.F.R. para hacer un nuevo juicio era, justamente, que “se había quebrado la voluntad” de todo el jurado a partir de esa situación. Que fue un condicionante para la condena.
Según la Cámara de Casación, que incluso tuvo acceso al registro audiovisual, se trató solo de una conjetura a partir de un hecho cierto. “Nada indica que la voluntad de los integrantes del jurado haya sido afectada”, agregó Casación.

Se lo pudo confesar a su novio
Recién durante 2014, después superar las barreras internas y los temores, la mayor de las hermanas abusadas, cuando tenía 16 años, pudo revelar el calvario que había sufrido de chica y de esa manera abrió la investigación que derivó en la condena.
La confesión la hizo ante su novio, la persona en la cual encontró la confianza suficiente para contar los abusos que padeció por su padre en la vivienda que compartían en Punta Alta.
Esa apertura permitió que su hermana menor también denunciara y luego se conociera el caso de su prima, a quien abusó y corrompió.

El fiscal Mauricio del Cero, acusador en el caso, le había pedido a la jueza técnica que le impusieran a N.F.R. la pena máxima para un concurso de delitos, que es de 50 años de prisión. Sin embargo, le fijaron la sanción de 32 años de prisión.