RainbowEx: se presentó la primera denuncia penal en Bahía Blanca

15 octubre, 2024

RainbowEx: se presentó la primera denuncia penal en Bahía Blanca

La primera denuncia penal en Bahía Blanca contra la plataforma RainbowEX, sospechada de haber montado una estafa piramidal, se presentó en las últimas horas ante el Ministerio Público Fiscal.

La formuló una mujer, a la que se identificó solo con las iniciales R.L.G., según publicó La Nueva.
Su presentación dio inició a la Investigación Penal Preparatoria (IPP) 23.903/24, se informó.
En principio la denuncia quedó a cargo de la UFIJ Nº 2 genérica, frente a la que subroga el fiscal Diego Conti.
Sin embargo, no se descarta que el sumario pueda ser girado -por las características del hecho- a la fiscalía de delitos complejos, a cargo del fiscal Gustavo Zorzano, o a la de delitos informáticos, cuyo titular es Rodolfo De Lucia.
La mujer dijo que llegó al sistema a través de una amiga y que invirtió, en principio, 200 dólares, que entregó a Roberto Sayas, titular de un lavadero ubicado en la calle Brandsen al 200, posible nexo en Bahía de RainbowEx.
Luego sumó más dinero a la causa hasta que el caso se hizo público y ya no pudieron retirar el dinero.

Se van del país
Rainbow Exchange anunció en las últimas horas que va a abandonar el país, aunque le pidió 88 dólares a cada uno de sus inversores a fin de poder retirar el dinero que colocaron.
La situación explotó en San Pedro y ya reportó allanamientos y dos detenidos, Luis Pardo y Martín Liberati, vinculados a la financiera Over Cash.
Luego se comprobó que había estafados en distintas ciudades del país, entre ellas Bahía Blanca.
La investigación se inició hace casi una semana, luego de que algunos damnificados indicaran que nos les permitían retirar el dinero.

Además, y tras las averiguaciones del caso, la Comisión Nacional de Valores (CNV) confirmó que RainbowEx no estaba autorizada para operar en el país.
Se descubrió también que Knight Consortium, la fundación que está detrás de RainbowEX, no está registrada ni tiene ningún aval legal, por lo que surgieron dudas sobre la legitimidad del negocio.
Los representantes de la empresa prometían un rendimiento de 1% diario, en dólares, pero todo hizo eclosión cuando comunicaron que sus clientes no podían retirar el dinero que habían invertido.